COSAS A TENER EN CUENTA

Alguna vez en la vida puede que nos tengamos que enfrentar a la decisión de tener que comprar un piso o una casa. La compra de un inmueble es una de las inversiones más importantes en la vida de una persona, por ello ha de ser una decisión meditada y que engloba muchos aspectos a tener en cuenta.

Una cosa esta clara, lo más importante es sentirnos seguros en cada paso que demos, ya que la compra de una vivienda significa invertir parte de los ahorros en la obtención de un futuro más satisfactorio.

ECONOMÍA

Una de las primeras cosas a las que deberíamos prestar atención es la parte económica. Ya que antes de lanzarnos hay que comprobar nuestras capacidades económicas y ver cuánto estamos dispuestos a gastar en la nueva vivienda. Tanto si queremos realizar la compra o alquiler de un piso deberíamos estimar que tendremos que destinar sobre un 30% de nuestros ingresos mensuales.

Esto se debe a que los bancos no suelen financiar el 100% de la operación, sino como máximo el 80%, el restante 20% debemos aportarlo nosotros, además hay que tener en cuenta que hay un 10% más correspondiente al pago de los impuestos derivados de las transacciones de compraventa.

En cuento a la solvencia financiera también se aconseja que las cuotas no pasen de ese 30% de los ingresos mensuales. Se habrá de hablar con el banco para concretar los plazos en los que ir devolviendo el préstamo hipotecario ya que cada entidad tiene sus propios criterios.

INFORMACIÓN URBANÍSTICA

Es importante que nos asesoremos sobre el Plan General de Ordenación Urbana que hay sobre el inmueble: la clasificación del suelo, alineaciones a viales, condiciones de las terrazas y la edificabilidad para saber si nos quedan m2 para posibles ampliaciones. En caso de comprar viviendas de segunda mano deberemos conocer si tiene algún tipo de protección o está catalogada por parte de la administración.

REGISTRO DE LA PROPIEDAD

Hay que comprobar que la vivienda no tenga cargas financieras, para ello deberemos pedir una nota simple en el registro de la propiedad, en ella se describe y ubica la propiedad, se indica quiénes son los propietarios, si tiene algún tipo de carga y otros avisos.

COMPROBAR DEUDAS

En pisos de segunda mano se aconseja comprobar que a la compra de la vivienda todas las deudas estén saldadas.  El Impuesto de Bienes inmuebles (IBI), por ejemplo. Hay que solicitar siempre al vendedor un certificado del Ayuntamiento que demuestre que el inmueble está al corriente de pago de este impuesto anual obligatorio, así evitamos sustos de tener que pagar los IBI correspondientes a los cuatro años anteriores si el propietario los tuviera pendientes.

Sucede lo mismo con la comunidad de propietarios. El nuevo dueño se responsabiliza de las deudas del anterior propietario en caso de no estar libre de cargas. El día de la firma de la escritura conviene exigirle al vendedor un certificado conforme no tiene deudas con la comunidad. También es interesante hablar con el presidente de la comunidad para saber si existe alguna derrama acordada o si está prevista alguna obra relevante en la finca.

CERTIFICADO EFICIENCIA ENERGÉTICA

Es un documento oficial donde podremos comprobar las características energéticas del inmueble que vamos a comprar y así poder compararlo con otros que tengamos en mente.  Es importante este documento porque podremos analizar la hipoteca energética que nos creará la adquisición de la vivienda a lo largo de la vida útil de la misma. Elegir una vivienda con etiqueta A en la categorización de eficiencia energética supone un ahorro estimado del 80% respecto a una calificación F, algo positivo tanto para el bolsillo como para el medio ambiente. 

UBICACIÓN Y ORIENTACIÓN

La ubicación de tu vivienda define varios aspectos de tu día a día; desde la calidad de vida y el tiempo de desplazamiento entre tu casa y tu trabajo, hasta tu vida social. Por eso hay que tener en cuenta no solo el precio y las características de la vivienda sino también el lugar en donde se encuentra situada.

En cuanto a la orientación es importante conocer el máximo aprovechamiento solar, la orientación óptima es el Sur, frente a la orientación Norte que nunca recibe luz directa. También es importante conocer dónde está el viento predominante de la zona que en nuestro caso es el Noroeste y analizar si hay elementos urbanos que lo bloquean o canalizan.

REVISIÓN DE LA VIVIENDA

Es importante conocer la estructura de nuestro edificio, ya que esta no podrá ser modificada y si queremos hacer nuevas distribuciones tendremos que saber que es posible para no afectar al sistema portante del edificio. Por lo tanto, si queremos hacer modificaciones de nuestra vivienda deberemos analizar antes de la compra si pueden ser posibles.

Si se trata de un piso de segunda mano, habrá que volcar los esfuerzos en comprobar los sistemas de aislamiento, conductos e iluminación. Si existe algún elemento defectuoso lo mejor es avisar al anterior propietario, ya sea particular o una promotora, para que se encargue de los arreglos pertinentes.

Te recomendamos que contrates una visita previa con un arquitecto. Así, te aseguras de que la vivienda está completamente en buen estado evitando preocupaciones futuras.

ASESORAMIENTO PROFESIONAL INMOBILIARIO

Nuestra recomendación es que busques a profesionales en este campo para que te asesoren en una decisión tan importante como ésta, ya que si te planteas buscar la vivienda por tu cuenta lo que al principio para un ahorro económico, se puede transformar en futuros quebraderos de cabeza y malas decisiones.

Estos asesores conocen el precio adecuado de cada vivienda según la ubicación que tiene. Además cuentan con experiencia y conocimiento dentro del mercado inmobiliario, y están capacitados para llevar a cabo todos los procedimientos a seguir y garantizar que la operación sea exitosa. Por otro lado, estos profesionales han sido capacitados para negociar y llegar al mejor acuerdo posible, por lo que seguramente lograrán mejores precios en tu beneficio.

La compra de una vivienda debería ser una acción racional. Sin embargo, somos seres con sentimientos que a veces son difíciles de controlar. Dar el paso y convertirse en propietario de un inmueble es una situación que no está exenta de cierto apasionamiento y exaltación. No obstante, es importante mantener la cabeza fría durante el proceso, y no dejarse llevar por impulsos de los que nos podríamos arrepentir.